El Alzheimer es una enfermedad que degenera algunas partes del cerebro y resulta difícil de diagnosticar de manera precisa. Por ello, se han realizado diversos estudios para identificar tratamientos que puedan ayudar a prevenirla.
Uno de los síntomas principales es la pérdida progresiva de la memoria, lo que puede dificultar seguir una conversación, perder la noción del tiempo y el espacio, y olvidar personas cercanas, especialmente familiares. También pueden presentarse cambios bruscos en el comportamiento.
Distintos estudios han revelado que esta enfermedad puede prevenirse con actividades como la lectura, ejercicios de fortalecimiento mental (como crucigramas o sopas de letras), o realizar alguna actividad física que favorezca la oxigenación del cerebro, estimulando los neurotransmisores.
Además, mantener una alimentación rica en vitamina E y D es crucial para preservar el buen funcionamiento del cerebro y otros órganos, lo que ayuda a evitar problemas en la vejez. También es importante conocer si algún familiar en el árbol genealógico ha padecido esta enfermedad, ya que esto podría permitir un diagnóstico médico más preciso.
Recuerden mantener una vida saludable y adoptar buenos hábitos para el bienestar general.